Dataprius dispone de los mecanismos necesarios para que nuestras carpetas y documentos sean accesibles por aquellos usuarios designados.
Mantener un repositorio de archivos para los clientes es ya una forma habitual de trabajo para cientos de empresas que usan el sistema a diario.
Descargar versión FreeTodas la cuentas del sistema disponen de un sitio web.
Los clientes y cualquier persona con la que compartimos carpetas o archivos, pueden acceder a nuestra web.
En la web, tendrán acceso a las carpetas y archivos designados por la empresa.
Muchas empresas colocan un accceso en su propio sitio web como zona privada para clientes.
Los archivos pueden ser compartidos definiendo si se permiten descargas y ediciones, así como determinando si son de solo lectura.
Para compartir carpetas se otorgan permisos de acceso a los usuarios.
Es tan sencillo como hacer un click en la ventana de permisos de la carpeta en la aplicación.
Podemos enviar invitaciones a esos usuarios. Estos accederán entrando por la zona web de nuestra cuenta Dataprius personalizada con el logotipo de la empresa.
Enviar un email con archivos adjuntos en forma de enlaces es muy sencillo en Dataprius. Se dispone de correo seguro integrado.
Se pueden crear enlaces a ficheros con fecha de caducidad, indicando quienes tendrán acceso, si pueden descargar, editar o solo visualizar el documento.
Los clientes, denominados Usuarios Web en el sistema, pueden subir documentos.
Estos archivos se reciben en una bandeja de entrada, podemos revisarlos y guardarlos en las carpetas del cliente con un par de clicks.
Por supuesto los clientes no pueden modificar ni borrar nuestras carpetas.
Cuando se centralizan los documentos de los clientes, los archivos ya no dependen de los correos enviados y recibidos de forma individual por los empleados. Todo el mundo sabe dónde están.
El cliente en la actualidad conoce que existen los medios para disponer de toda la información en su teléfono o en la web.
La eficiencia a la hora de localizar archivos de los clientes ha mejorado radicalmente.
Si los ficheros de los clientes no se encuentran distribuidos en los ordenadores de los empleados podemos garantizar su privacidad.
La seguridad y protección de los datos por parte de la empresa pasa a otro nivel.